En esos momentos, vi que el hombre
se sacó una pistola del bolsillo. Sabía que iba a
morir, abracé fuerte a Dani y… En ese momento, llegó Carlos con
David,Alvaro, Blas, mis padres y la policía.
-¡Porfavor una ambulancia! ¡Dani
está fatal! –grité como pude caundo los vi-.
Alvaro llamó a una ambulancia
mientras los policías detuvieron a los hombres que me secuestraron. Todos vinieron corriendo
a abrazarme, pero estaba muy débil, las cicatrices que me habían dejado me
dolían mucho.
No tardó en llegar la
ambulancia.
Solo dejaban que fueran dos personas
en la ambulancia y decidimos que fuesen Carlos y David. Yo también fui en la
ambulancia, tenían que curarme algunas heridas.
Blas cogió el coche de Dani y se
llevó a Alvaro y mis padres al hospital.
Llegamos al hospital y a mi me
vendaron algunas cicatrices, no tenía mucho pero Dani estaba muy grave, le
habían dado un golpe muy fuerte en la cabeza. No nos dejaron entrar a ver a
Dani por su estado.
Decidimos irnos cada uno a su casa,
porque los médicos nos dijeron que si ocurría algo más nos llamarían pero que
de momento su estado era crítico, tendríamos que esperar unos días para que se
despierte. Yo estaba destrozada, me quería morir, todo esto había ocurrido
por mi culpa.
Los chicos me dijeron que si mis
padres me dejaban, me podía ir con ellos a su apartamento para quedarme a
dormir.
Mis padres no me dejaron hasta que
vinieron los chicos y los convencieron.
Llegué al apartamento reventada pero
aún así estuvieron los chicos conmigo hasta las tres de la mañana vimos pelis y
hablamos.
-____ , si quieres, puedes dormir en
la habitación de Dani –dijo David-.
-Vale, pero esque estoy muy
preocupada por Dani, ¿se encontrara bien? –dije muy preocupada-.
-____ va a estar bien, no te
preocupes –dijo Alvaro intentando animarme-.
-Eso espero –dije un poco aliviada-
¡Buenas noches Anti-Heroes! Os quiero.
-Buenas noches pequeña, que
descanses –dijeron todos-.
Me fui a la habitación de Dani,
estaba muy cansada, me puse el pijama y decidí acostarme, cuando vi un diploma
que tenia colgado, era del instituto en el que ponía: Daniel Fernández Delgado,
nacido el 11 de Diciembre de 1995. Me puse a pensar sobre las fotos de mi madre
que tambien eran del 1995. Pero todo sería casualidad porque hay muchísimas
personas que nacieron en 1995, así que no le di importancia.
Me acosté y me quedé completamente
dormida.
Eran las once de la mañana, y sentí
que llamaron a Carlos y Carlos y los chicos estaban muy preocupados, salí de la
habitación de Dani y fui a averiguar lo que pasaba.
-¡Chicos! ¿Se puede saber que está
pasando? –dije preocupada y vi que estaban todos llorando-.
-____, eh...Dani… -dijo Alvaro
hablando como pudo, entonces lo interrumpió David-.
-Nos ha llamado el médico y nos ha
dicho que debido al golpe que le dieron en la cabeza, le afectó al cerebro y el
cerebro como es tan delicado no pudieron hacer nada, y hoy a las 9:30 de la
mañana ha fallecido…-dijo sin parar de llorar-.
-¿¡Qué!? Porfavor decidme que esto
sólo es una broma –no pude evitar llorar-.
-____ no estamos de broma, con esto
no se bromea –dijo Blas-.
El funeral fue al dia siguiente, por
la tarde. Tuvimos que ir a Álcazar de San Juan porque su familia decidió
enterrarlo allí.
No me salían las palabras,
sólo lloraba. Allí estaba toda la familia, estaba llenísimo de gente. Yo
preferiría haber estado muerta a que él muriese, mi vida ya no era nada sin él.
Vi el cuerpo de Dani, tenía la piel muy pálida, me quedé mirándolo por unos
minutos, no quitaba la mirada de él, hasta que se llevaron el ataúd para
enterrarlo.
-¡DAAAAAAAAANI! –grité-.
-¿Qué te ha pasado ____? ¿Por qué
has gritado? –me preguntó Carlos muy asustado entrando por la puerta de la
habitación de Dani-.
-¿Y Dani?¿Donde esta?¿Que le ha
pasado? –le pregunte histérica-.
-____ cálmate, aún no nos ha llamado
el médico, deberías dormirte que son las cinco de la mañana.
-Entonces -hice una pequeña pausa y
continué- ¿todo esto sólo ha sido una pesadilla?
Le conté lo que soñé y él me aseguró
que sólo había sido una pesadilla.
-____ si quieres, puedes venir a mi
habitación a dormir conmigo, porque te conozco y se que no te encuentras muy
bien.
-No Carlos, no quiero molestarte,
vete tu a tu habitación que yo dormire en la de Dani –dije metiéndome entre las
sábanas-.
En ese momento, Carlos me cogió en
brazos y me llevó a su habitación.
-¡Carlos! ¡No! ¡Para! –dije
aguantándome la risa-.
-¿Qué es este escándalo? Me habéis
despertado –dijo Alvaro haciendo cara de niño bueno-.
-Sólo le he dicho a ____ que se
venga a mi habitación a dormir pero no quiere –dijo Carlos poniendo cara de
pena-.
-Venga ____ sois amigos, ¿no? Vete a
dormir con Carlos y no me molestéis más que quiero dormir –dijo Alvaro
bostezando-.
-Esta bien -me quedé en silencio y
seguí- no dormiré contigo.-dije mirando a Carlos y riéndome de él-.
Me solté porque me llevaba en brazos
y me fui corriendo hacia la habitación de Dani.
-Eres mala –dijo Carlos intentado
hacerme pena-.
-Lo siento sombrerito, pero esque me gusta dormir en la habitación de Dani, me recuerda a él.
-Tienes razón. –me dijo Carlos y nos
fuimos los dos a dormir-.
Oí que estaba sonando un móvil, miré
la hora y eran la nueve y media de la mañana. Nadie cogía el móvil y me levanté
de la cama.
-¡Chicos! ¡Que esta sonando el móvil
de alguien! ¡Despertaros! –dije mientras averiguaba de quien era el móvil que
sonaba-.
Era el móvil de Alvaro, entré a su
habitación y le quité las sabanas tirándolas al suelo.
-¡Alvaro! ¡Levanta que te están
llamando por el móvil!
-Mamá, dejame dormir un poco más
–dijo Alvaro medio dormido-.
-¡Alvaro! –le grité. Estaba tan
dormido que se pensaba que estaba en su casa con su madre-.
Se cayó de la cama y se despertó.
-¿Qué pasa? –dijo Alvaro levantándose del suelo-.
-¡Ves! Ya han colgado –le dije algo
enfadada-.
-No te entiendo ____ ,¿Qué ha
pasado? – dijo extrañado-.
-Te estaban llamando por el móvil.
-¡Pues haber contestado boba! –me dijo sacándome la lengua y cogiendo el móvil-.
De repente, volvieron a llamar y
Alvaro cogió el móvil y contestó.
-Alvaro, ¿quién es? –le dije con
intriga pero no contestó-.
Acabó la llamada y me explicó todo.
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